Rafael Márquez Lugo se retiraría en junio

Más que resignado, Rafael Márquez Lugo tiene decidido su retiro del futbol.

Con apenas 33 años y más de 12 meses sin jugar, el delantero colgará los botines en junio, a menos que un milagro le borre las molestias en su rodilla izquierda.

"Si antes de la fecha del término de mi contrato no veo un avance realmente importante, que me pueda permitir seguir jugando, tendré que tomar la decisión de cerrar este capítulo de mi vida y de ver otras cosas", declaró en exclusiva con CANCHA.

El delantero ha sido sometido a cuatro operaciones, la última hace más de un año, para repararle una ruptura de menisco externo y fractura de cartílago. Hasta ahora, tras una larga convalecencia, ve casi imposible su regreso a las canchas.

Su contrato termina al final del Clausura 2015.

-¿Cómo estás con esta difícil novela?

"Más que una novela, esto ya es una pesadilla, es la triste realidad. La molestia me sigue apareciendo, la sigo sintiendo y, desgraciadamente, no nos ha dejado avanzar como quisiéramos, no me permite todavía correr.

"Sí, he sentido mejoría, la realidad es que es muy, muy leve y va muy lenta. Ha llegado el momento de realmente cuestionarme hasta dónde vamos a llegar con esto y en qué momento vamos a tener que decidir, porque es evidente que en algún momento tendré que tomar una decisión, entonces, está claro que mi contrato termina en junio y que ya no puedo aspirar más allá de eso".

-¿Cómo canalizar tus energías fuera de la cancha?

"Al final (el futbol) es lo que más me gusta y de lo que más sé".

"Me he dedicado a esto durante toda mi vida, 15 años de profesional, entonces, no pretendo alejarme del futbol, será de otra manera, en otra etapa, ya veremos".

-¿Sería un milagro el que desaparezca la molestia en este plazo tan corto, cuando has batallado casi el año?

"Sí, sería algo así. Digo, la esperanza está ahí y el trabajo diario también para tratar de conseguirlo, pero es obvio que se vislumbra muy difícil. Tengo el panorama muy claro y me parece que también la directiva tiene más o menos claro qué es lo que está pasando conmigo: una lesión muy fuerte, muy grave para un futbolista, como para poder desempeñarme profesionalmente. Tal vez de una manera diferente puedo llevar una vida normal, pero ya como futbolista profesional es una lesión de gravedad y es complicado recuperarte".

-¿Es triste terminar así, sin jugar?

"Sin duda. Uno de los motivantes para regresar es tratar de despedirme jugando y es obvio que ningún futbolista ve terminada su carrera con una lesión, pero bueno, también ha sido un proceso muy largo".

"Ese proceso no ha dejado que me tome por sorpresa este cúmulo de sentimientos, los he podido manejar de una manera diferente. En contraparte, nació mi hija y me ha brindado otro tipo de felicidad, que es mucho más grande que cualquier gol o minuto en la cancha. Ha sido muy importante y me ha dado fortaleza, entereza para seguir viniendo, no decaer y no decir: 'Bueno, abandono todo antes de cualquier cosa'. Estamos tratando de llevar las cosas a límite.

"Si llevándolas a límite un milagro sucede, qué bueno, si no, de otra manera ya tenemos preparado y visualizado todos los escenarios".

-¿Cómo te has preparado para el momento del adiós?

"Yo creo que me he preparado a lo largo de toda mi carrera, no comencé a pensarlo o ver qué seguía desde que me lastimé. De una u otra manera he tratado de no dedicarme nada más al futbol. Siempre he tenido claro desde que empecé que es una etapa nada más en mi vida, que cuando termine esto seré muy joven. He tratado de hacer diferentes cosas a parte del futbol, cuando estaba bien, siempre ver a qué quería dedicarme cuando dejara el futbol y eso es de gran ayuda, porque no me tomó descobijado. Ya tengo un cierto panorama de lo quería en mi vida y para poder llevarlo a cabo ahora que se dio todo esto de la lesión. Estoy tranquilo".

-¿Hubo lágrimas en esos momentos?

"No, lágrimas como tal, no, pero evidentemente sí hubo momentos de tristeza, frustración y, sobre todo, de tratar de retirarme jugando, de agradecer a la afición de las Chivas, que se ha portado muy bien conmigo. Sí me hubiera gustado poder retirarme jugando, por devolverle un poco a toda esta afición que no se ha olvidado de mí, que a pesar de que hoy el equipo está en primer lugar, en la Final de Copa y que está prácticamente clasificado, la gente me sigue recordando".

-¿Te duele el ver esto de cerca, no ser partícipe?

"Sí, porque a mí no me tocó nada así en las Chivas, fueron momentos muy complicados los que me tocaron realmente en el equipo y ahorita ver que por fin está en donde todo el mundo quiere verlo, donde su afición lo merece, pues sin duda que me encantaría ser parte de ello en la cancha.

"Ha sido complicado eso, pero también me da gusto porque lo he disfrutado mucho desde la sala de mi casa, de ver los partidos ahí, porque he visto por lo que han pasado los compañeros, el sufrimiento que se ha vivido, cómo se ha batallado en el vestidor y por fin veo a un equipo como lo queríamos ver muchos desde que llegué: unido".

Información de: "CANCHA".

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